Cuida tus palabras y peticiones, a veces se cumplen, si lo crees.

Habían pasado 6 años desde que salí de la televisión para experimentar en radio, disfruté al máximo cada una de las etapas, conocí a gente maravillosa, crecí profesionalmente, me titulé de la licenciatura, estudié mi maestría, fui maestra de dos universidades, empecé a dar conferencias, amé mis trabajos, los odié, reí, lloré, todas las cosas que pueden pasar en seis años, sin embargo, en todo ese tiempo hubo una frase que siempre dije: «Un día volveré a la televisión» tal vez como una frase al aire, y al mismo tiempo diciéndolo fuerte, o pensándolo fuerte para que Dios me escuchara, no estaba tan descabellado, (que me escuchara) Él SIEMPRE me escucha.

No me malinterpreten, no fue por caprichosa, o porque creyera que porque yo lo decía iba a suceder, a veces pienso y digo cosas y aunque puedo parecer muy segura, también puedo tener mucha duda por dentro o mucho miedo de que no se realice aquello que arde en mi interior, porque si de algo estoy segura es que Dios puede decir NO, y yo solo tengo que aceptarlo.

Durante estos seis años, tuve acercamientos, tuve intentos, en los cuales siempre le decía a Dios, si tu no quieres no, y a veces así era, me tranquilizaba saber que Él no había querido, o más bien, no era el tiempo.

Me hace feliz saber que Dios siempre escucha a sus hijas, que me ama, y me muestra su amor cada día con uno y mil detalles, y no tienen que ser materiales o laborales, sino con su voz cerca, con su amor tan tangible, tan real.

Cuida tus palabras, cuida lo que le pides, Él está atento, es TAN fiel, TAN Él, TAN JESÚS.